En la primavera de 1800 Goya, como primer pintor de Cámara, recibió
el encargo de Carlos IV de pintar un retrato de la Familia Real. En ese momento
la Familia Real se encontraba en el Palacio de Aranjuéz.
Conozcámolos más de cerca:
El primero a la izquierda es el príncipe Carlos, el segundo
hijo de Carlos IV, y a su lado su hermano mayor, príncipe Fernando, que fue el
heredero del trono. Fernando creció
odiando a sus padres, especialmente a su madre, pero justamente de ella heredo
sus peores atributos que hicieron de él
un ser egoísta, caprichoso y
autoritario, convirtiéndose años después
en un rey muy mal querido por su pueblo.
La señora mayor justo al lado del príncipe
Fernando es María Josefa, hermana del rey.
Solterona, muríó poco después de la finalización del cuadro. Justamente
al lado de María Josefa hay una mujer joven que vuelve la mirada, por lo que
no la podemos ver la cara. Hay dos
hipótesis sobre “la mujer misteriosa”:
Unos dicen que representa a la princesa Maria Amalia, una de las hijas
del rey, que murió siendo todavía niña, tres años antes de pintarse el
cuadro. El hecho de que estuviese
ausente volviendo la cara podría significar que estaba muerta. Pero la segunda y
más popular es que sería la futura mujer del futuro rey, Fernando, como
representación de que el actual Príncipe de Asturias se casaría algún día,
perpetuando la dinastía. Por que
todavía no se sabía quien era, la futura consorte esta en una postura "ausente al no existir en ese momento. De hecho, Fernando no solo se caso una
vez, sino cuatro. Al lado de la misteriosa mujer esta otra de las hijas del
rey, María Isabel, que se caso con su primo y tuvo nada menos que 12 hijos. Al
lado, la controvertida reina María Luisa de Parma. Goya la planto figura central del cuadro con
su fuerte personalidad y dominando totalmente a su marido Carlos IV. De joven debió ser bastante guapa –
cualquiera lo diría – y se le cuentan varios amantes. Como ya no contaba con su belleza, se vistió fastuosamente con sus mejores galas y joyas, haciendo ostentación de su superficialidad. El pequeño
niño al lado de ella es su hijo príncipe Francisco, un ser sensible y frágil,
que sufrió las constantes burlas y chismorreos por parecerse tanto a uno de los
amantes de la reina, Manuel Godoy - el
pueblo tenía claro que era hijo de Godoy. Justo al lado de la reina, el rey Carlos IV, un
hombre débil de carácter. Aunque llego al trono lleno de ideas y sueños,
pronto estos fueron frustrados por la caprichosa y dominante María Luisa. Su mujer y sus consejeros se encargaron de
tenerlo bien controlado y de que ninguno de sus propuestas se llevasen a
cabo. Se dice que muríó fracasado y decepcionado.
Detrás de él vemos a su hermano Antonio y escondida a su lado a la hija mayor
del rey, princesa Carlota. A Carlota la amañaron en matrimonio cuando solo contaba con diez años. Carlota fue una mujer ambiciosa y por un
tiempo llego a ser reina de Portugal. Las últimas tres figuras de nuestra derecha
muestran al hermano de la reina, Don Luis de Parma, y a su mujer, Maria Luisa,
con su bebé. Luis era tío carnal de María Luisa, que era le segunda hija de del
rey. En un principio Luis se iba a casar con Carlota, pero se enamoró de María Luisa, que era alegre e inteligente, e insistió en casarse con ella.
Como bien relataba en mi anterior entrada, los protagonistas
fueron pintados individualmente. Goya al
fondo aparece como mero espectador retratista.
El rey Carlos IV llamaba a este cuadro “de todos juntos” y
originalmente estuvo colgado en el Palacio Real de Madrid.
No era de extrañar que entre tanto primo carnal casándose y mezclándose las mismas ramas en varias generaciones, creasen seres incapaces y tarados en intelecto y moral. El propio rey Carlos IV era primo carnal por parte parterna de María Luisa y pariente cercano por vía materna. Pero eran reyes y príncipes, regentes que debían gobernar un gran país, ostentar la batuta de España, y el gran desastre de su linaje y sus vidas abocaron en el peor de los horrores: el dominio, la guerra, la extrema pobreza el caos, la muerte.
¿Pero quienes fueron realmente estos personajes? ¿Cuales fueron sus individuales historias? ¿Podrán defenderse a mis calumnias? ¿Podré tener piedad de ellos después de escuchar sus relatos suplicando clemencia?
Escuchemos que es lo que nos tienen que decir cada uno de ellos. ...
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